En la década de los ochenta, la sociedad española estuvo marcada por una intensa vida política y social provocada principalmente por la Transición. Fue un periodo de grandes cambios impulsados por los movimientos sociales e iniciativas ciudadanas que reivindicaban los derechos humanos, la calidad de vida o la igualdad de género entre otros. En este contexto, se constituye el 3 de mayo de 1982 Asociación ADEPSI. 

Sin embargo, es en la década anterior cuando se inician los primeros esbozos de Asociación ADEPSI. Un grupo de familias con niños y niñas con discapacidad intelectual empiezan a compartir su preocupación por el futuro ante la gran carencia de recursos sociales que ofrecieran oportunidades a estas personas cuando fueran adultas. 

Como todos los comienzos, los primeros pasos estuvieron llenos de incertidumbre, pocos recursos económicos y mucho, muchísimo trabajo. El tesón y la ilusión de estas familias de impulsar un modelo social inclusivo basado en la participación en la comunidad de las personas con discapacidad, fue acompañado por la necesidad de formarse y conocer buenas prácticas innovadoras que se estuvieran realizando en otras organizaciones del país. 

Nuestro claro enfoque comunitario, buscando siempre la participación activa de las personas en el entorno, ya fuera yendo al mercado o realizando actividad física en el pabellón deportivo del barrio; fue incorporándose a los nuevos servicios que íbamos poniendo en marcha. 

En la década de los 90, nuestros servicios de día continúan creciendo debido a la gran cantidad de personas que requieren de nuestros apoyos y fundamos dos Centros Especiales de Empleo. En uno de ellos, el trabajo se centra en una actividad totalmente innovadora en la época, la agricultura ecológica como actividad principal para promover el empleo de personas con discapacidad. Además, comenzamos a trabajar con un servicio de vivienda centrado en un entorno comunitario en el que trabajar la autonomía de las personas y potenciar su integración social. 

Con la llegada del segundo milenio, nos consolidamos con el desarrollo de proyectos que dan respuesta a las dificultades a las que se enfrentan las personas con discapacidad y sus familias, como fue la constitución de la FUNDACIÓN TUTELAR CANARIA ADEPSI en 2002 o el fomento de la inclusión laboral mediante nuestra Agencia de Colocación especializada en discapacidad. De forma paralela, iniciamos formaciones adaptadas y acreditadas para acceder a un empleo normalizado. 

En estos años hay una gran transformación en la definición y conceptos de la discapacidad que compartimos con júbilo, pues realmente materializaba nuestra visión integral e inclusiva de la discapacidad. En estos últimos años, hemos afianzado un Modelo de Atención que atiende a la individualidad, garantizando los apoyos y acompañamientos necesarios para que las personas pueden seguir sus propios proyectos de vida.

En esta última etapa, consolidamos además el enfoque comunitario que nos ha caracterizado siempre con el desarrollo de servicios específicos que prestan apoyo y acompañamiento a las personas en sus entornos naturales.

Estas cuatro décadas han estado marcadas por un permanente interés por la mejora continua, el aprendizaje y la innovación. Gracias al conocimiento y experiencia adquirida, a nuestra profesionalidad y transparencia, tenemos una sólida estructura para enfrentar nuevos retos.

En la actualidad, vivimos una época de importantes cambios para los que tenemos que estar preparados como es el auge de la digitalización y su consecuente brecha digital que afecta a un 45% de las personas con discapacidad, la implementación de modelos de empleo que potencien las oportunidades de inserción o modelos de vivienda en la comunidad para todas las personas independientemente de sus necesidades de apoyo. 

Para poder enfrentar todos estos retos necesitamos promover alianzas con otras organizaciones, empresas, administraciones públicas y sociedad en general. 

Por último, queremos dar las gracias a todos los que habéis colaborado de una forma u otra durante estos años: familias, trabajadores, voluntarios, empresas, administraciones y socios ofreciendo vuestro tiempo, esfuerzo y recursos. Con vuestro apoyo, hemos impulsado más de 1500 contrataciones de personas con discapacidad, formado a 2200 personas e impartido más de 53000 horas formativas. Actualmente, contamos con unos 120 profesionales, 214 familias confían cada día en nuestra labor y apoyamos a casi 900 personas, de las cuales 114 son de la isla de Lanzarote, con el objetivo de mejorar su calidad de vida.